Antes de recomendarles algunos remedios caseros para combatir el resfriado es importante conocer lo básico de este virus.
El resfriado común es una infección viral que afecta la nariz, los senos paranasales, la faringe y la laringe,causado por más de 200 tipos de virus. La mayoría de ellos por el rinovirus, una infección pequeña pero frecuente.Se transmite a través de las pequeñas gotas que expulsamos al estornudar o toser, con el contacto directo hacia la persona resfriada o al tocar cualquier objeto contaminado. Además, este virus suele durar una semana.
Entre sus síntomas nos encontramos con:
Tos
Mocos Fluidos.
Dolor o picor de garganta.
Malestar general.
Irritación ocular.
Congestión nasal (cuando la mucosa de la nariz se inflama).
No hay manera efectiva de prevenir dicha infección pero podemos incluir en nuestra alimentación un buen y gran aporte de vitaminas C y D y minerales para reducir las posibilidades de contagiarnos con gravedad, cubrirnos al estornudar o toser para evitar que el virus afecte a otras personas. El ejercicio físico puede ayudar
a reducir la congestión nasal y fortalecer el sistema inmunológico.
Existen muchas medicinas o remedios caseros que podrían servir para disminuir el efecto de los síntomas, los mejores 5 son:
Sopas
Cuando estamos resfriados no puede faltar una sopa caliente con pollo y vegetales para despejar nuestras vías respiratorias. Puedes agregarle ajo, el cual actúa como antibiótico natural.
Infusión de Menta
La menta posee muchos beneficios, como por ejemplo contiene un mineral que ayuda a producir glóbulos rojos, Fibra,vitamina A y potasio. También mentol que sirve para descongestionar y aliviar dolores de garganta.
Infusión de eucalipto
El eucalipto es una planta medicinal perfecta para las enfermedades que afectan las vías respiratorias como los refriados, facilitando la respiración, capaz de matar microbios y bacterias y reducir los niveles de azúcar en la sangre.
Jengibre
El jengibre es rico en nutrientes como el potasio, fósforo y vitamina C y ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
Alimentos ricos en zinc
Poseen nutrientes y minerales esenciales para potenciar nuestro sistema inmunológico y garantizarnos energía. Normalmente suele confundirse el resfriado y la gripe, siendo dos cosas muy distintas pero similares.
La gripe, conocida también como influenza, es una infección del sistema respiratorio que afecta la nariz, garganta, bronquios y de alguna manera también los pulmones. Puede presentar complicaciones para personas que sufran de enfermedades respiratorias crónicas, enfermedades renales o cardiológicas, llegando también a la neumonía.
Para conocer en qué momento podría ser riesgosa en este tipo de personas y acudir aun médico, se debe estar al tanto de los signos:
– Tos grave.
-Dolor torácico.
-Fiebre por más de 5 días
-Empeoramiento de los síntomas.
Las infecciones del oído son complicaciones no tan graves del virus, mientras que la neumonía es riesgosa a causa de la influenza, que puede causar una infección o coinfección bacteriana. Otras posibles complicaciones graves mediante la gripe pueden ser:
inflamación del tejido que rodea el corazón (miocarditis), el tejido cerebral (encefalitis) o el tejido muscular (miositis, rabdomiólisis) y la insuficiencia multiorgánica. También puede afectar en personas con asma produciéndole un severo ataque.
La influenza se divide en cuatro tipos de virus, entre ellas: A, B, C y D. Los virus A y B de la influenza son causadas en casi todos los inviernos de Estados Unidos, ocasionando infecciones. Las infecciones de influenza tipo C suelen causar enfermedades respiratorias leves. Los virus de influenza D afectan solamente al ganado y no se cree que puedan causar enfermedades en los seres humanos.
La gripe, al igual que el resfriado, es transmitido de una persona a otra a través del aire o el contacto físico, por las gotas al toser o estornudar de las personas infectadas. Entra al cuerpo a través de la nariz, luego de esto la persona desarrollará los síntomas entre uno a cuatro días después. La persona infectada puede estar contagiada hasta 7 días.
En sus síntomas más comunes nos encontramos con Fiebre alta (puede llegar a 40ºC), fuerte dolor de cabeza y de garganta, pérdida de apetito, dolores musculares, tos, debilidad y cansancio. Otros síntomas menos frecuentes son dolor en los ojos y que se tornen llorosos, congestión nasal y moqueo.
Podemos tratarlo con medicamentos y baños calientes para reducir la Fiebre y la tos, inhalaciones de vapor de agua caliente o analgésicos para aliviar sus síntomas. Es importante tratar la tos excesiva ya que puede convertirse en neumonía, que es la infección de los tejidos pulmonares, considerada una enfermedad grave.
La neumonía puede ser contagiosa porque el agente infeccioso que la causa se esparce rápidamente en el aire por medio de estornudos, tos y mucosidad. Las personas más propensas de contraerla son las que estén contagiadas de gripe u otras enfermedades del aparato respiratorio. También dicen que influye la época del año, si se está en invierno o hay mucha humedad en el ambiente.
Existen factores que podrían hacer que la gente se contagie de las enfermedades respiratorias, entre ellos:
Factores Ambientales: Contaminación por el humo de cigarrillo.
Por una mayor exposición a los microorganismos.
Clima: Por los cambios bruscos de temperatura, calor, frío.
Desnutrición. Las defensas del organismo disminuyen y lo hace más propenso a las infecciones.
Falta de vitamina A. Dicen que las enfermedades infecciosas van de la mano con la deficiencia de vitamina A, importante para el crecimiento y la función de las células T y B del sistema inmunológico.
Por eso es necesario fortalecer el sistema inmune, por ser el encargado de protegernos de bacterias, virus y otros microrganismos que producen enfermedades. La alimentación sana es esencial, incluyendo las grasas saludables que encontramos en el pescado y aceites vegetales, consumiendo alimentos probióticos porque estos nos protegerán de infecciones gastrointestinales. También consumir antioxidantes, vitaminas A, C, D para ayudar a regular la función de algunos tipos de células del sistema inmune, puede ser a través de frutas cítricas o proteínas y legumbres.